sábado, 27 de junio de 2009

La paradoja del crecimiento

En un breve artículo del DANE se expone lo que muchos sospechabamos sobre el crecimiento económico de mediados de ésta decada; no representó un crecimiento equiparable en el mercado laboral. Esta paradoja no parece ser propia de Colombia pues se ha reportado en otros países de la región. Existen tantos factores como hipótesis para explicar el fenómeno. El artículo es del 2007, nunca conoció el trágico desenlace de nuestro Icaro en el cielo. Desde éste lado de la historia vale la pena preguntarse si esta paradoja ya era un índice de la carga especulativa del crecimiento económico. Es preciso notar que éste fenómeno habla sobre el progresivo incremento de la desigualdad y el deterioro del bienestar social pues en una economía liberal el bienestar se deriva del trabajo formal. Un análisis detallado (y algo politizado) en este tema es presentado por la senadora liberal Cecilia Lopez. En él se formulan explicaciones a la altísima desigualdad en Colombia en comparación con otros paises de la región. Sin embargo los índices económicos del artículo del DANE citado al principio, muestran un panorama común a nivel internacional por lo cual se concluye que los factores allí presentes explican solo parcialmente el fenómeno colombiano, en donde otros factores contribuyen al recrudecimiento de la desigualdad.

PS: será que la paradoja del crecimiento era también la paradoja de la 'inversión'?

viernes, 19 de junio de 2009

Candidaturas sin partido

Enrique Peñalosa critica la reforma política (ver Reforma política excluyente) porque cierra la posibilidad de iniciativas independientes que pueden romper con la obesidad en que a menudo devienen los partidos políticos. Como ejemplos del éxito de dichos modelos, Peñalosa expone el caso de las alcaldías en Bogotá y medellín (Fajardo) e incluso la primera elección de Uribe. Yo creo que el caso de las alcaldías demuestra que las propuestas políticas independientes son, a nivel de alcaldías, un modelo exitoso, sin embargo no creo que el gobierno de uribe sea un modelo exitoso de propuesta independiente. No me referiré a la calidad moral de Uribe, ese no es el tema que intento exponer aquí, sino la cuestión de si las candidaturas independientes a la presidencia deban ser promovidas por la legislación electoral. Y digo que el caso Uribe es una muestra de lo que puede ir mal pues pudimos observar como durante la campaña la imagen de un candidato independiente es mucho más elocuente que la de un partido, vimos como la historia -ausente- del candidato independiente se convierte en receptor de toda clase de esperanzas políticas por parte del electorado. Y todo esto es bueno sino fuese porque al final, cuando es elegido, la independencía se traduce en ingobernabilidad y las prebendas parlamentarias (mico incluido) se presentan como la única forma de sacar adelante los proyectos legislativos del ejecutivo (una muestra: 'eliminando la competencia' y 'transfuguismo').

jueves, 18 de junio de 2009

Sobre Fajardo, a riesgo de equivocarme opino

No me gustan aquellos que explotan el silencio para condensar esperanzas (léase ganar votos). Crean una falsa sensación de armonía. Si bien el misterio actúa como factor de cohesión, evidenciado en proyectos religiosos y nacionalistas fundados en el misterio divino y de la patria, constituye una contradicción con la modernidad y su proyecto democrático. Si el acceso a los medios de comunicación es un derecho democrático, la opinión comprometida es el deber que deben asumir los candidatos políticos como garantía de transparencia. Creo que la campaña a la presidencia de Fajardo le esconde muchos 'guardados' al voto de derecha colombiano y su estilo y origen de clase me sugieren que también al voto de izquierda. Más allá de la calidad moral de estos 'guardados' mi crítica es en el método. No es sano para una democracia este tipo de silencio, coharta la deliberación pública. La idea de reconciliar la opinión política es un ideal falaz. La historia nos ha enseñado la tiranía que esconden estos proyectos. Una sana democracia se alimenta de la diferencia y no de cualquiera, de la diferencia ideológica aquel acumulado de historias y esperanzas de las diferentes clases sociales. Sano es que la derecha supere el terror paranoico al poder de la izquierda y viceversa. Para ello la izquierda debe ser izquierda y la derecha derecha, su único marco común deben ser las garantías democráticas.

viernes, 12 de junio de 2009

El proyecto de nación (1a Parte)

Terrorismo o conflicto

La ley ejerce una forma de violencia cultural al desconocer la subjetividad de la conducta. El proyecto de nación sería impensable sin el ejercicio homogeneizante de la ley. En esta medida, cuestionar la legitimidad de la ley en virtud de la subjetividad de la experiencia es cuestionar el proyecto de nación. El embarazo del estado frente a la ilegalidad con dimensión social, se asemeja al embarazo de la medicina moderna frente a las enfermedades crónicas. El error en ambos campos es el mismo, parten de un contrasentido pues no existe 'ilegalidad' con dimensión social ni 'enfermedad' que sea crónica. No son una amenaza al ser nacional o individual, son un cuestionamiento a su concepción misma, obligan a un cambio de autopercepción. Por supuesto, si a toda costa nos empecinamos en mantener las viejas nociones podemos terminar logrando un cuerpo sano libre de aquellas 'enfermedades', pero éste será un cuerpo amputado, un adefecio artificial cuya existencia solo se mantiene por la más triste expresión de terquedad.

Confesiones de un amateur en comunicación

Como escapar a la tiranía del formato? se pregunta el amateur. Esta pregunta es fundadora; comienza el proceso por dominar el medio. Es que los blogs te vuelven polémico, vos queres decir algo, querés que te escuchen y entonces se te sale... pelaste el cobre. Y lo volves a hacer una y otra vez, sos un blogger. Lo peor de todo es que reconoces vestigios de tu personalidad en esta abominable criatura de la farándula de opinión. Tu naríz es larga y tu culo gigante, no cabes en ningúna parte. Sos un pistolero, un mamerto, un oportunista retórico (la causa subordinándose al valor retórico), sí, sos también un para y un intelectual. Ya entiendo a los políticos. Ante esto lo extraño es reconocer nuestra moderada personalidad fuera de la blogosfera. Es el formato, el implícito detrás de este desdoblamiento. Cuando tenes alguien al frente y le dirijís la palabra lo más probable es que este te escuche, no le tenes que gritar (todo lo contrario), podes guiñarle el ojo mientras decís alguna sandez, una sandez que en el ciberespacio te stigmatizaría como un sujeto fundamentalista o degenerado. Podes decirle una cosa y la otra, podes bajar el tono, podes decir 'pero' en el camino, al final tu voz como que se funde con el otro porque no solo buscamos existencia, también aceptación. Es en esta dialéctica que el diálogo se constituye como un poder propio. Existe diálogo en el formato blog? si es así, sin duda no se da de la misma forma que en la conversación privada -la conversación pública parece replicar la (anti)dinámica del blog. Dominar el medio es pues acercar nuestro yo online al offline, permitirle esa ilusión de transparencia en el lenguaje donde a menudo se funden el tú y el yo. Quizás, como decía Jaime Garzón, aunque no recuerdo sus palabras exactas: creo que de tanto hablar algo queda.

domingo, 7 de junio de 2009

On freedom of expression...

I don't know much about policy on freedom of expression -yes, I know ignorance is not allowed on cibernauts, knowledge is at one click!, but what da hell, I just wanted to say that in this issue I take a position which is similar to that of Keynes on economics. I think that almost all the criticism (back and forth) from where Keynes feeds his economic-policy theory can be transcribed into freedom of expression. In fact this self-preserving dialectics; rule and game, lange and parole, etc. is also seen at the political realm with the notion of constitutional democracy. Theses are highly appreciate approaches on economy and politics, it is real worth it to see how this paradigm can be adapted to the realm of freedom of speech or expression...

Well, now that I think about it further, this is what Habermas has point out when looking for the ideal of a public sphere; it also compromise a normative component. Still, given my ignorance on the details of Habermas approach, I can freely wonder about the specific encoding of this normative component. Should it be produced, reproduced and consumed as a legalistic or ethical (cultural) mechanism?
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